• Construye un menú que esté adecuado al delivery o que sea práctico para recoger en la tienda. Fácil de llevar, fácil de comer y saludable. Por ejemplo, puedes seguir algunos de los consejos nutricionales aprobados para el consumo de alimentos que ayuden a fortalecer el sistema inmunológico
  • Reduce tu menú a una oferta manejable para poder hacer tus compras pensando en la oferta local de insumos e ingredientes. Piensa en lo que tienes disponible de acuerdo a la oferta de tus proveedores y arma tu menú. Es la hora de ser creativos.
  • Es tiempo de ahorro: maneja cuidadosamente tus inventarios. No compres más de lo que necesitas, recuerda que lo más probable es que la clientela disminuya considerablemente en estos días. Parte de ser responsables en situaciones como la que vivimos implica hacer esfuerzos y ayudar a los demás, no acapares y acopies más de lo que requieres por miedo a quedarte sin insumos. Esto puede generarte un desbalance en tus cuentas innecesariamente.
  • Usar técnicas de preservación y conservación ayuda a no desperdiciar. Por ejemplo, hacer conservas, mermeladas y confituras con las frutas o algunos encurtidos con vegetales ayuda a prolongar la vida de tus ingredientes y amplía sus formas de uso en el futuro. Sigue los pasos adecuados para usar esta técnica y abrirás un mundo de posibilidades y sabores propios de tu local.
  • Si te toca cerrar tus operaciones, deja muy limpio los lugares de almacenamiento de tus productos. Vacía las neveras y límpialas a profundidad para evitar la propagación de bacterias y gérmenes.
 Recuerda, esto es una coyuntura, no tomes decisiones apresuradas, evalúa tu situación y pondera los riesgos y beneficios de seguir prestando servicio o de ser necesario, suspender las actividades por unos días.