Sin duda, los sentidos del ser humano juegan un papel fundamental dentro de la gastronomía y es que gran parte de los momentos felices que podemos experimentar son alrededor de una mesa. A continuación analizaré con detalles, junto a ti, cuál es el gancho perfecto que guarda la gastronomía. ¡Empecemos de inmediato!
Aromas y sabores, lo mejor que conserva la cocina
La extensa fusión que abordan los colores, los aromas y, por supuesto, los sabores en la cocina actual y contemporánea se elaboran con una compleja y atractiva creatividad, pero, sobre todo, se hacen con los sentidos. Por esa razón, en el ámbito culinario no todo se trata de comer, sino de disfrutar la comida.
El aroma y el sabor abarcan todos los sentidos que poseemos así como también las facultades que hemos asimilado y experimentado durante nuestras vidas, es decir -por fortuna- día tras día la textura, el sabor y el color estarán siempre presentes y lo mejor es que ahora más que nunca están ahí, cerca de nuestras percepciones porque en el interior de nuestro organismo existen sentidos que enfatizan más que otros a la hora de consumir algún producto alimenticio.
Ahora bien, para entrar más en materia, veamos cómo se comportan con estos sentidos:
- La vista
El primero de los 3 sentidos que se encuentra más presente al momento de comer. ¿La razón? Simple, percibimos más la comida a través de este sentido. Ya que la visión es la responsable de identificar cada plato, su presentación y la cantidad. Por ello, la importancia de que las fotografías y vídeos sean atractivos para el comensal.
- El olfato
Seguidamente, mediante el olfato podemos experimentar la sensación e intensidad de los distintos aromas que encontramos en la gastronomía. Este sentido trabaja a la par con el gusto, ya que ambos son esenciales para impactar a cualquier comensal que pruebe los platos exquisitos que sirves en tu restaurante. De hecho, recientes estudios han confirmado que el 80 % del sabor que encontramos en cada comida proviene única y exclusivamente del olfato.
Adicionalmente, con este sentido cada individuo tiene la capacidad de recordar los platos del pasado y, además, nos ayuda con la digestión en la preparación de los jugos gástricos y esta acción nos ocasiona apetito.
- Tacto
Con este sentido, podemos descubrir la textura o la temperatura de cada plato, lo que logra que la idea individual de comer cambie totalmente, es decir, nos ayuda a identificar si el platillo que deseamos degustar está frío o caliente. Lo mismo sucede si se encuentra en buen estado o no.
En definitiva, con estos tres sentidos podemos percibir y vivir la gastronomía desde el mejor ángulo que esta posee dentro de este medio culinario.
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